Podemos definir la Sialodenitis como la inflamación de las glándulas que producen la saliva. En este caso los conductos se obstruyen y no se segrega saliva. Nuestra saliva es fundamental para el buen funcionamiento de nuestra salud. Un problema en la función de las glándulas salivares pueden llevar a enfermedades de las encías o a desarrollar caries dental.

Existen distintos motivos que pueden provocar la inflamación de las glándulas, estos motivos pueden ser:

  • Cálculos,tapones,
  • Estrechamiento de los conductos salivares
  • Obstrucción por malformación de los conductos o simplemente algún objeto que pueda obstruir estos conductos.

Siendo la Sialoadenitis obstructiva la más frecuente de todas.

La saliva llega a la boca a través de pequeños tubos llamados conductos, que son los que se obstruyen cuando sufrimos sialodenitis. Una de las características más evidentes de una sialodenitis obstructiva es la hinchazón de la glándula cuando se ingiere alimento, ya que al producir más saliva para envolver el bolo alimenticio, y tener los conductos obstruidos, ésta no puede salir produciéndose la hinchazón. Esta afectación se la conoce como el síndrome de la hora de comer.

Nuestras glándulas salivares producen alrededor de un litro de saliva al día. Esta saliva es fundamental para la lubricación de la boca, nos ayuda a tragar, protege los dientes contra las bacterias y nos ayuda en la digestión de los alimentos. Las glándulas salivares humanas se dividen en dos grupos, diferenciándolas en función de su tamaño e importancia podemos hablar de las glándulas salivares mayores y las glándulas salivares menores.

 

Causas de Sialoodenitis

En la mayoría de los casos la Sialoadenitis es producida por “cálculos” salivares, aunque también puede ser la consecuencia de una infección bacteriana o viral, aunque en otros casos puede surgir debido a otras causas como una reacción alérgica, un golpe o como consecuencia de exposición a radiaciones. En la sialodenitis se bloquea el conducto salivar y esto produce hinchazón de la glándula salivar, además de dolor y mal sabor de boca.

Las piedras salivares son acumulaciones de depósitos cristalizados de saliva. Estas piedras o cálculos a veces pueden obstruir los conductos y bloquear el flujo de la saliva. Si la saliva no puede salir se acumulará en la glándula y causará dolor e hinchazón. Es dolor suele ser intermitente y va a peor de forma progresiva. La enfermedad puede ser de duración aguda (pasajera) o crónica.

Los cálculos son más propicios a aparecer en las glándulas submanidbulares, que en las glándulas parótidas, debido en gran parte por la forma de los conductos y por el tipo de secreción, aunque también se dan casos de sialolitos, en los conductos de Steno. Más extraño es la aparición de cálculos en las glándulas sublinguales e incluso en las glándulas menores.

 

Causas de Sialoadenitis | Inflamación Bacteriana o Vírica

Las infecciones pueden ser otra causa de inflamación de las glándulas salivares o Sialodenitis, estas infecciones se suelen producir en personas de avanzada de edad, aunque existen otros motivos que pueden llegar a provocar infecciones. Una de estas infecciones virales pueden ser las paperas, que a menudo afecta a la glándula salival parótida, pudiendo provocar parotiditis.

Las paperas es una enfermedad que visiblemente afecta a las glándulas salivales, provocando que la cara de una persona se hinche generando altas fiebres

Estas infecciones bacterianas se pueden ser producidas por:

  • Obstrucción en los conductos por cálculos, puede desembocar en una infección bacteriana.
  • Limpieza deficiente en la boca
  • Por desihidratación
  • Tabaquismo
  • Enfermedad crónica

El Staphylococcus aureus y otros microorganismos como los estreptococos o las bacterias anaerobias pueden provocar la enfermedad.

 

Síntomas de la Sialoadenitis

Los síntomas de esta inflamación pueden ser variados en función de las personas, pero te dejamos con los más comunes:

  • Hinchazón en la zona de la glándula
  • Dolor molestias al hablar y tragar. Dolor por debajo de la mandíbula
  • Boca seca
  • Escalofríos
  • Fiebre
  • Edema o inflamación de la glándula salivar
  • Dolor en el cuello
  • Dolor dental
  • Náuseas y vómitos

 

Tratamiento de la Sialoadenitis

El tratamiento tendrá en cuenta la causa que ha originado el trastorno. En algunos casos, el propio sistema defensivo del organismo se encarga de atacar la infección por lo que no es necesario tratamiento. Aunque será el odontólogo  tras valorar los síntomas del paciente,prescribirá un tratamiento.

  • Si tenemos un absceso, se podrá recurrir a una aspiración o incluso a una cirugía con el fin de conseguir drenar la infección.
  • Los mejores tratamientos son una buena higiene oral. Un cepillado a conciencia de los dientes, paladar y lengua, por lo menos una vez después de cada comida, conseguirá evitar que la infección se extienda y será un gran aliado para su curación.
  • Suspenda inmediatamente el consumo de cigarrillos, si somos fumadores, con el fin de conseguir una curación más rápida.
  • Los enjuagues con agua tibia y sal (media cucharadita de sal en una tasa de agua) pueden proporcionar alivio y mantener la boca húmeda.
  • Tomar mucha agua y usar gotas de limón sin azúcar para aumentar el flujo de saliva en la boca y reducir la hinchazón. El masaje de la glándula con calor puede ayudar.